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Por María Zacco
MAR DEL PLATA, 26 (ANSA) - Un hombre que vive en un cuarto
asceta, usa zapatos viejos y no viaja en autos lujosos, pero
sobre todo un ser lúcido, con timing político, que tiene en sus
manos una herramienta fundamental para lograr la transformación
de la Iglesia: la comunicación. Es el análisis de "Francisco de
Buenos Aires", el documental argentino sobre el Papa que se
exhibe en el Festival Internacional de Cine de Mar del Plata.
"Mi intención fue hacer una película política, no religiosa",
dijo el psicólogo, publicista y periodista argentino Miguel
Rodríguez Arias, en entrevista con ANSA.
La decisión de los cardenales aquel 13 de marzo de 2013, que
puso a Jorge Bergoglio al frente del Vaticano, sorprendió al
mundo. También a él, ya que su nombre no estaba en los
pronósticos. La diferencia de votos que llevaron al cardenal
argentino al Sillón de Pedro -100 a 15- demostró, sin embargo,
que ese resultado fue muy meditado.
El documental de Rodríguez Arias analiza las razones por las
cuales el religioso argentino fue elegido por sus pares. Sin
duda, confiaban en las habilidades para la comunicación del
"cura callejero" para hallar un camino que resuelva, al menos en
parte, la profunda crisis que atraviesa la Iglesia.
"El problema más grave del Vaticano es el de los curas
pederastas. Después, está el Banco Vaticano (IOR), donde hay
cuentas cifradas y que lava dinero del narcotráfico y de las
armas. Francisco se pregunta, en principio, si el Vaticano debe
tener un banco y cuál debe ser el destino de ese dinero",
sostuvo el publicista, quien desde 1983, con el advenimiento de
la democracia en Argentina, ha analizado los discursos de los
políticos los medios de comunicación, especialmente en la
televisión.
Rodríguez Arias instaló, en los años 90, el uso público de
una expresión usada en psicología, el "acto fallido" -que pone
de manifiesto una expresión diferente, a veces incluso
contraria, a la intención conciente de una persona-, analizando
los discursos y gestos de políticos que se presentaban en
distintos programas de televisión.
El resultado de ese trabajo fue el documental "Las patas de
la mentira", exhibido en 1996, que legó a la posteridad muchas
frases famosas que se siguen repitiendo hoy en día para dar
cuenta de algunas acciones non sanctas de algunos políticos.
Testimonios, extractos de homilías de Bergoglio extraídas de
un frondoso archivo, sumado a material brindado por el Centro
Televisivo Vaticano, analizan la transformación del religioso
jesuita a partir del momento en que fue nombrado Papa y de su
importancia como figura política, que se trasluce en esos
materiales, prácticamente no difundidos por la prensa.
"Descubrí a Bergoglio a través de esos archivos, un material
que no tiene nadie. Apenas asumió como Papa, decidí hacer el
documental", recordó Rodríguez Arias.
A pesar de haber tenido una educación religiosa, el
publicista se reconoce "agnóstico"; si se quiere, una ventaja a
la hora de desmenuzar los discursos del pontífice y los
testimonios de los entrevistados desde un punto de vista no
religioso.
"Desde el inicio me pareció un hombre distinto: de una gran
sencillez, comprometido con los desposeídos. La mayoría de los
diarios no daban una imagen clara de cómo era y él tenía en
parte responsabilidad por eso ya que no daba entrevistas, lo que
mostró una imagen errónea de su persona", sostuvo.
El documental cuenta con los testimonios de Gustavo Vera,
titular de la Fundación La Alameda -lucha contra la trata de
personas-; Alicia Oliveira, una de las fundadoras del Centro de
Estudios Legales y Sociales (CELS); y representantes del
judaísmo y el islam.
También hablan los periodistas Sergio Rubín y Francesca
Ambrogetti, autores del libro "El jesuita" (2010), la única
biografía de Francisco publicada antes de su elección como Papa,
y Elisabetta Piqué, amiga del religioso y autora de otro texto,
"Francisco, Vida y Revolución", editado en 2013.
Todo lo que no pasa por la televisión, se sabe, no existe.
Francisco parece haber tomado nota de eso y, según Rodríguez
Arias, actúa en consecuencia.
"Como se dice en el film, el Papa tiene el gozo religioso de
alguien que siente cómo puede transformar al mundo. El había
pensado en el retiro tras cumplir los 75 años pero, una vez en
el Vaticano, se dio cuenta que tenía a mano un instrumento muy
importante para difundir lo que había soñado siempre: ni más ni
menos que la transformación de la Iglesia", sostuvo.
Para comprender cómo se fue gestando el carácter del hoy
pontífice también se escuchan los testimonios de su hermana
María Elena y de algunos de sus amigos, como Clelia Luro (pareja
del obispo Jerónimo Podestá) y el cardenal Jorge María Mejía.
Desde la democratización de la Iglesia al trabajo esclavo o
los deberes cotidianos de un buen cristiano están presentes en
forma reiterada en los discursos y misas de Francisco. Su
contacto directo con los fieles y su lenguaje llano son
fundamentales para cambiar la imagen del Vaticano.
En ese sentido, para Rodríguez Arias, "no es una exageración
compararlo con Gandhi o Nelson Mandela".
El documental argentino demuestra que el modo en que alguien
elige comunicarse es el secreto para sumar fuerzas, ponerle el
pecho a las dificultades y convertirlas en un motor para
provocar grandes cambios.
Tal como lo expresa el papa Francisco en una de sus homilías:
"La vida es como el fútbol: a los penales los tenés que atajar
en el rincón donde te lo tiren, no podés elegir cómo lo van a
patear. La vida viene así y hay que ir atajándola".
MRZ-FM/GAN
26/11/2014 16:27
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