Por Chiara Rancati PARIS, 11 (ANSA) - El arquitecto italiano Renzo Piano es el gran protagonista de la temporada invernal de la Cité de l'Architecture en París, que dedica una amplia muestra a su "arte de construir y ensamblar" y al "proceso colectivo" que lo inspira.
    "Aquí se habla de método, pero en realidad para mí cada uno llega a hacer las cosas a su modo. Creí en una casa en la que todos eran constructores, pequeños constructores, por lo tanto así llegué a la arquitectura", explicó Piano.
    "Pero la arquitectura no es sólo construir: es también hacerlo para las personas, por una buena razón, y también la semántica, el arte de contar las historias, la belleza, el trabajo sobre los volúmenes. Es complejo. Pero yo llegué desde allí, desde el construir", agregó.
    Realizada en ocasión de los 50 años de actividad del arquitecto genovés, la exposición -que abre hasta febrero del año próximo- "no es una retrospectiva sino una presentación de los proyectos más recientes sobre los que trabajó o todavía está trabajando Renzo Piano", dijo el curador, Francus Rambert.
    La lista de proyectos expuestos es heterogénea y emblemática, aunque estrictamente contemporánea.
    Va desde las "Partes de ciudad", como el barrio postindustrial de Albere en Trento (noreste de Italia) a los trabajos sobre las "alturas", como el Shard, el rascacielos-esquirla que desde 2012 se levanta sobre la orilla derecha del Támesis.
    También desde las "comparaciones" -como con Le Corbusier en torno a la iglesia de Notre Dame du Haut en Ranchamp, a los "patrimonios urbanos" que reinventar, como la nueva sede del Whitney Museum en Nueva York.
    También hay un espacio especial para un proyecto todavía no realizado pero importante para Piano y su equipo, el hospital para niños de Entebbe (Uganda), proyectado para las actividades de la ONG Emergency.
    El montaje es insólito, articulado en torno a mesas que parecen bancos de trabajo, "como para invitar a los visitantes al taller".
    Sobre los distintos pisos se suceden borradores preparatorios, realizados o retocados con "la lapicera verde de la que Piano nunca se separa", estudios de volúmenes, fotos de obras y edificios completados, así como detallados modelos en madera que son una de las marcas de fábrica del estudio.
    "Este es un oficio en el que no es posible dar una fórmula -comentó Piano-. Es un oficio del hacer, es arte pero también encuentro con la sociedad, invención, ciencia. Así yo a las 10.00 soy arquitecto, a las 11.00 ingeniero, al mediodía un poco más artista, y así volviendo a comenzar. Es un oficio en el que se mezcla todo esto".
    Con un hilo conductor: "El deseo de crear lugares para las personas, y restituir el espacio a las ciudades". GDC/MRZ
11/11/2015 20:22