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FLORENCIA, 6 (ANSA) - "Lucir la casaca número 10 de Diego
Maradona no es algo que yo decida, pero si algún día en Napoli
me la asignan sería una enorme responsabilidad, pero también una
hermosa emoción", afirmó Lorenzo Insigne.
"Amo al Napoli y nunca pensé en irme, ni siquiera cuando los
hinchas me silbaban y yo respondía mal porque me dolían las
críticas y porque soy de esos jugadores que cuando al equipo le
va mal, son los primeros que lo sufren", agregó.
La remontada de Napoli en el campeonato, donde al cabo de
siete fechas marcha sexto a seis puntos del líder Fiorentina,
trocó críticas por elogios y hoy Insigne disfruta de su momento
de gloria.
"Si por mí fuera, me quedaría en Napoli todo lo que pueda y
el club lo sabe", se entusiasmó Insigne, quien consultado sobre
las chances de pelear por el "scudetto" afirmó: "Es prematuro
hablar de eso, pero claro que lo intenteramos hasta el final".
Insigne, autor de dos goles en la goleada por 4-0 en San Siro
que acrecentó la levantada del Napoli y la debacle del Milan,
trocó también "azzurra" por "azzurra", pues fue convocado a la
selección nacional para los próximos dos compromisos.
Hoy no pudo entrenarse a la par de sus compañeros en
Coverciano y a las órdenes de Antonio Conte de cara a los duelos
con Azerbaiján en Bakú y con Noruega en Roma por las últimas dos
fechas en las eliminatorias a la Eurocopa 2016.
La ausencia de Insigne generó cierta alarma, pero el médico
de la selección italiana, Enrico Castellacci, se encargó de
quitarle dramatismo: "No pasó nada, arrastra un par de golpes en
la rodilla de los últimos partidos".
"Acordamos con los colegas del Napoli que le extraeríamos el
líquido que se le acumuló en la articulación", completó
Castellacci sobre Insigne, quien se entrenó el lunes y hoy debió
guardar reposo.
Mañana será evaluado para saber si estará en condiciones de
jugar el sábado ante Azerbaiján en el penúltimo compromiso rumbo
a la Eurocopa de Francia.
Rebautizado como "Lorenzo el magnífico" ahora por los hinchas
del Napoli, Insigne goza de su momento con el club de sus
amores, como buen napolitano que es.
"No hay cosa más bella que jugar en el equipo de tu ciudad",
comenta Insigne desde la concentración "azzurra" detrás de un
par de lentes estilo Johnny Depp que se iluminan cuando la luz
choca contra el arete brillante que luce en su oreja.
Insigne hoy es aplaudido por propios y extraños, como sucedió
el domingo tras los dos goles convertidos en San Siro: "No es
algo que suceda todos los días", afirma al respecto.
El delantero de 24 años, padre de dos hijos y apasionado por
los tatuajes, afirma: "Espero que este se sólo el punto de
partida. Estoy feliz, pero todavía no logré nada", reconoce.
Con cinco goles convertidos en el campeonato, Insigne está a
uno del brasileño Eder, de Sampdoria y máximo artillero, y
comparte el segundo escalón del podio con un compañero de
equipo.
Se trata del argentino Gonzalo "Pipita" Higuaín, quien en
cambio no fue tenido en cuenta en su selección de cara al inicio
de las eliminatorias sudamericanas al Mundial de Rusia 2018 esta
semana frente a Ecuador en Buenos Aires.
Sobre las chances de Napoli de pelear por el título, Insigne
destacó que tras la pausa por la doble fecha FIFA, su equipo
chocará con el líder Fiorentina: "Un gran partido y un gran
desafío", según sus palabras.
Insigne no se olvida de los momentos amargos y por eso
aprovechó para agradecer: "A mi familia sobre todo, porque ha
hecho enorme sacrificios por mí", aunque no se olvidó de su ex
entrenador español, Rafael Benítez, hoy en Real Madrid.
"No olvidaré nunca que Benítez fue quien me permitió mejorar
también en la fase defensiva, aunque me siento más cómodo
jugando con el sistema que utiliza Maurizio Sarri", aclaró.
"Sarri es un técnico que transmite mucha confianza y que le
da muchísima importancia a lo táctico. Está en todos los
detalles", destacó el delantero que tampoco olvidó al checo
Zdenek Zeman, que lo dirigió en Pescara.
"Me hizo crecer como hombre y como jugador. No volvimos a
hablarnos, pero se que siempre está al tanto de cómo me va",
comentó Insigne.
El delantero del momento goza de su momento de gloria y se
ruboriza cuando lo comparan con el ídolo de su infancia y de
todo Nápoles: Maradona. "No molestemos al más grande con estas
comparaciones", sugiere.
Un Maradona que puso a Nápoles en el mapa del fútbol mundial
en su apogeo como jugador y al que el propio Sarri dijo que
espera convencer de que estaba equivocado cuando consideró que
él no era el técnico que Napoli estaba necesitando.
Un Sarri que también trocó escepticismo por entusiasmo, que
trabaja en silencio y que supo ganarse esa confianza con una
racha de cuatro victorias en fila en los últimos cinco partidos
en los que Napoli marcó 18 goles y recibió apenas uno.
Y fue ante Lazio, Juventus y Milan (estos últimos dos no
tuvieron un arranque alentador en el campeonato), pues son tres
de los equipos que también darán pelea por el "scudetto".
"Sarri tiene contrato por un año con opción por otros cinco,
en los que yo tengo posibilidad de confirmarlo cada abril",
explicó sobre el DT el patrón del Napoli, Aurelio De Laurentiis.
El entrenador sólo piensa únicamente en llevar al Napoli a lo
más alto. "Maurizio nunca le dio importancia al contrato, él
sólo piensa en el proyecto", explicó Alessandro Pellegrini, su
asesor legal.
De Laurentiis reconoce hoy que no se equivocó al elegir a
Sarri, aún cuando su plan inicial era contratar al serbio Sinisa
Mihajlovic, cuya continuidad en Milan quedó en la cuerda floja
por culpa justamente de Napoli.(ANSA).
SL-RFL/MRZ
06/10/2015 22:21
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